Cine William Oldroyd presentará Lady Macbeth
Redacción de Cultura.–El director de teatro y ópera William Oldroyd debuta en el cine con la adaptación de un «clásico oculto», «Lady Macbeth», un relato corto del ruso Nikolái Leskov que el realizador traslada a la Inglaterra victoriana para retratar hasta dónde puede llegar la crueldad de una mujer que quiere ser libre.
Inspirado en la obra de Shakespeare, «Leskov llamó así al relato porque se pensaba que esa crueldad no era propia de las mujeres. Pero nosotros sí sabemos que las mujeres pueden llegar a hacer cosas realmente horrorosas si son sometidas al tipo de crueldad que vemos en la película.
«Lady Macbeth», cuyo guión firma Alice Birch y que ha recorrido multitud de festivales de cine – se estrenará este viernes, 28 de abril, con una «maravillosa» Florence Pugh interpretando a una joven que «pelea» su precaria situación en la Inglaterra de 1865.
Oldroy explica que el motivo por el que escogió este relato para su ópera prima fue, precisamente, ese personaje, el de Katherine: «He dirigido obras de teatro con el espíritu de mediados del siglo XIX y los personajes femeninos o bien se suicidaban, o huían. Pero lo interesante de Katherine es que decide resistir, oponerse».
Katherine vive angustiada por culpa de su matrimonio con un hombre amargado al que no quiere y que le dobla la edad (Paul Hilton), y atormentada por su frío suegro (Christopher Faribank).
Cuando se embarca en un idilio con un joven trabajador (Cosmo Jarvis) de la finca de su marido, en su interior se desata una fuerza tan poderosa que nada le impedirá conseguir lo que desea para ser libre, aunque ello implique deshacerse de ellos a sangre fría.
Oldryd asegura que se trata de un «clásico oculto» publicado en 1875 y que Dimitri Shostakóvich adaptó para ópera en 1934. En Rusia «cree» que «sí hay muchas» versiones de esa ópera, aunque dice que le sorprende que no haya calado en los escenarios de Reino Unido.
Tampoco tiene gran recorrido el relato de Leskov en el propio cine: mientras que de «Cumbres borrascosas» dice que «al menos» hay cinco adaptaciones cinematográficas, tan solo hay una de esta «Lady Macbeth» rusa, una cinta de Andrezej Wajda en blanco y negro.
Y, a pesar de que él se ha curtido en la dirección de teatro y ópera, resalta que lo que quería hacer con «Lady Macbeth» era una película: «La pantalla se presta más para mostrar la prisión de la casa, asfixiante, y, en contraste, los salvajes exteriores, los campos. En teatro puedes hacer eso, pero es más efectivo en cine».
El séptimo arte en el que debuta el realizador, curtido en la dirección de cortometrajes, le ha permitido utilizar la cámara como un personaje más, usando planos fijos, generales o cortos, para resaltar esa «asfixia» en la mansión ya que «la cámara solo se mueve en el interior cuando Katherine está pensando», apostilla.
La cámara, sin embargo, sí viaja por los bastos exteriores, rodados entre New Castle y Durham, cerca de los páramos ingleses que inspiraron novelas como «Jane Eyre» o «Cumbres borrascosas» -de las hermanas Emily y Charlotte Brönte- en esta «Lady Macbeth» que difiere bastante del relato primigenio.
Diferente al original no solo porque Oldroyd ha acortado el título -la obra de Leskov se llamaba «Lady Macbeth de Mtsensk»- o porque traslada la acción de la Rusia zarista a la Inglaterra victoriana, sino por el propio final de la adaptación de Birch.
«Al final del libro Katherine es arrestada y llevada a prisión. Pero nosotros hemos permitido que ella termine triunfando, aunque es otro tipo de cárcel. Es libre, independiente, pero al fin y al cabo está atrapada.
La ironía, concluye, es que la «independencia que ella busca al principio de la película la ha conseguido, pero está completamente aislada y sola al final»
