El expresidente de EE. UU., de 82 años, enfrenta una forma avanzada de la enfermedad, aunque su equipo médico considera que es tratable
Washington — El expresidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha sido diagnosticado con una forma agresiva de cáncer de próstata que se ha extendido a los huesos, según informó su oficina en un comunicado oficial.
El diagnóstico se produjo después de que Biden experimentara un aumento de síntomas urinarios, lo que llevó a la detección de un nódulo prostático durante un examen médico la semana pasada. El viernes, se confirmó que el cáncer tiene una puntuación de Gleason de 9 (Grupo de Grado 5), lo que indica altamente agresiva de la enfermedad.
A pesar de la gravedad del diagnóstico, los médicos señalaron que el cáncer parece ser sensible a las hormonas, lo que abre la posibilidad de tratamientos eficaces. Biden y su familia están actualmente evaluando opciones terapéuticas con su equipo médico.
Este diagnóstico llega cuatro meses después de que Biden concluyera su mandato presidencial en enero de 2025, siendo el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos. Durante su presidencia, enfrentó cuestionamientos sobre su salud y capacidad para ejercer el cargo, especialmente después de un debate en junio de 2024 que generó preocupaciones sobre su agudeza mental.
En julio de 2024, Biden decidió no buscar la reelección y respaldó la candidatura de su vicepresidenta, Kamala Harris, quien finalmente fue derrotada por Donald Trump en las elecciones de noviembre.
El cáncer de próstata es uno de los más comunes entre los hombres, especialmente en edades avanzadas. Aunque en muchos casos progresa lentamente, las formas agresivas, como la que afecta a Biden, requieren atención médica inmediata y tratamientos especializados.
La comunidad política y médica sigue de cerca la evolución de la salud del expresidente, esperando que los tratamientos disponibles puedan ofrecerle una calidad de vida adecuada en esta nueva etapa.
