Aurora, Colorado. — Hannah Chung ha dedicado su año como voluntaria de AmeriCorps a ayudar a estudiantes con problemas crónicos de asistencia en las escuelas de Aurora.
Desde coordinar transporte escolar hasta acompañar a adolescentes en sus luchas con la salud mental, su trabajo ha sido clave para 25 jóvenes que, en muchos casos, confían solo en ella dentro del sistema educativo.
Esta semana, sin embargo, ha tenido que comunicarles que no regresará el próximo año.
“Me dicen: ‘Eres la única persona aquí en la que confío’”, cuenta Chung, quien planea retomar sus estudios en psicología. “Es bonito saber que hemos construido ese vínculo, pero duele ver lo solos que se sienten”.
Chung no será la única en irse. Más de 300 puestos como el suyo podrían desaparecer el próximo ciclo escolar si no se revierte la decisión del gobierno federal de recortar más de $400 millones al programa AmeriCorps, un golpe que afecta al 40% del presupuesto nacional de la agencia.
Colorado, junto a otros 24 estados, ha presentado una demanda para intentar frenar los recortes aprobados por la administración Trump, que ya impactan a 27 de los 37 programas de AmeriCorps en el estado. La vicegobernadora Dianne Primavera denunció que la eliminación de los fondos golpea de forma desproporcionada a programas educativos, especialmente aquellos que atienden a estudiantes en situación de vulnerabilidad.
“Están cancelando estos programas incluso antes de que termine el año escolar”, dijo Primavera. “Es inaceptable. Los que más sufren son los niños que más apoyo necesitan”.
Aunque el estado ha logrado mantener operativos algunos programas con fondos de emergencia, Primavera advierte que el presupuesto es limitado y no podrá sostenerlos indefinidamente. “Estamos buscando dinero debajo de cada piedra. Pero no sabemos cuánto más aguantaremos”, lamentó.
Una pérdida que va más allá de los números
En Pueblo, Maria Chavez Contreras coordina a ocho miembros de AmeriCorps en el programa HIPPY (Instrucción en el Hogar para Padres de Niños en Edad Preescolar), donde las familias reciben apoyo para preparar a sus hijos para el jardín de infancia a través de juegos educativos y actividades en casa.
Este mes, preparan la ceremonia de graduación: los niños se visten con birretes, reciben certificados y mochilas con útiles escolares. También se entrega un reconocimiento a los padres, por su compromiso semanal con la educación de sus hijos.
“Los niños piensan que están jugando, pero están aprendiendo. Y los padres ganan confianza como educadores en casa”, explicó Chavez Contreras. “Quitar estos programas no solo es injusto, es dañino”.
Con la incertidumbre sobre el futuro de AmeriCorps, educadores y funcionarios temen que muchos estudiantes y familias se queden sin el único apoyo que tienen.
Fuente. https://www.chalkbeat.org/
