Operación Coral: Ministerio Público despliega peritajes financieros y testimonios clave contra red de militares y policías acusados de lavado y fraude.
Santo Domingo- Con documentos que trazan el rastro del dinero y testimonios expertos, la Procuraduría Especializada contra la Corrupción (Pepca) fortalece su caso contra una presunta red de militares y policías acusados de desviar más de 4,500 millones de pesos del erario público, en uno de los juicios por corrupción más emblemáticos del país.
Las pruebas clave presentadas este martes
En una audiencia celebrada ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, la fiscalía presentó:
Testimonio de perito de la Cámara de Cuentas sobre el patrimonio de Greybby Cuello Acosta, esposa del general Juan Carlos Torres Robiou (uno de los principales acusados).
Peritaje financiero #69 del INACIF, que reveló un patrón sistemático de transferencias entre empresas fantasmas, cuentas personales de los imputados y testaferros.
Compras inmobiliarias sospechosas: La empresa Único Real State adquirió 10 terrenos en Colinas del Oeste, donde luego se construyeron viviendas para los generales Adán Cáceres Silvestre y Boanerges Reyes Batista, además del coronel Franklin Mata Flores.
La trama de lavado y el papel de “Madre Tierra”
Los fiscales demostraron cómo la Asociación Campesina Madre Tierra y otras entidades sirvieron como fachada para mover fondos ilícitos, en una estructura que combinaba contratos públicos fraudulentos, triangulaciones bancarias y compras de propiedades con dinero de procedencia dudosa.
Jonathan Pérez Fulcar, fiscal de la Pepca, destacó que estas evidencias “confirman el esquema organizado de corrupción” que involucra a altos mandos castrenses.
Próximos pasos
El juicio fue suspendido hasta el 8 de mayo, cuando continuará la presentación de pruebas. El Ministerio Público reiteró que no cederá en su lucha contra la impunidad, en un caso que ha expuesto los hilos de una red que saqueó al Estado dominicano por años.
Lo que está en juego: Más que un proceso penal, este juicio representa una prueba de fuego para el sistema judicial dominicano frente al poder de las estructuras corruptas enquistadas en instituciones clave.