Una denuncia de “transfobia de Estado”
Brasilia, (EFE). – La diputada trans brasileña Érika Hilton denunció este miércoles al Gobierno de Donald Trump por lo que consideró una clara “transfobia de Estado”, luego de que se le negara su identidad de género en un visado para viajar a Estados Unidos.
En el documento, que debía permitirle asistir a un evento organizado por la comunidad brasileña, Harvard y el MIT, Hilton fue identificada como masculina, lo que le generó una profunda preocupación.
El visado y la preocupación de Érika Hilton
La legisladora, que pertenece al Partido Socialismo y Libertad (PSOL), había sido invitada a participar en un evento académico en Estados Unidos, pero decidió desistir del viaje después de recibir el visado. A través de sus redes sociales, Hilton expresó su malestar por la situación, destacando que el visado no reflejaba su identidad de género y manifestando el temor que sentía ante el trato que podría recibir en el aeropuerto.
“Me preocupó el trato que podría recibir en el aeropuerto por parte de las autoridades estadounidenses, teniendo en cuenta que mi nombre es femenino y en el visado era descrito como masculino”, explicó Hilton. “Para ser sincera, sentí miedo y no acepté someterme a ese tipo de cosas”, agregó la diputada.
Una denuncia de “transfobia de Estado”
Hilton, además de lamentar lo sucedido, calificó el incidente como un acto de “transfobia de Estado” y acusó directamente al presidente Donald Trump, quien ha impulsado varias medidas que afectan negativamente a la comunidad LGTBI en los últimos tiempos.
La diputada también subrayó que le preocupa profundamente que un país pueda desconocer los documentos oficiales que validan la identidad de los ciudadanos, como los brasileños, y modificar esos registros a su antojo. “Es preocupante que un país ignore documentos oficiales sobre la existencia de los propios ciudadanos y los modifique según la narrativa y los deseos de retirada de derechos del presidente de turno”, expresó Hilton.
Posibles denuncias y acciones diplomáticas
Ante esta situación, Hilton anunció que está evaluando la posibilidad de presentar una denuncia formal ante las comisiones de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos (OEA). Además, solicitó al Gobierno brasileño que convoque al embajador estadounidense en Brasil para exigir explicaciones sobre el trato recibido.