Santo Domingo. El Observatorio Cultural Caribeño (OCCRD) ha expresado su preocupación por la situación actual del Ministerio de Cultura de la República Dominicana, el cual se encuentra acéfalo y con sus planes paralizados tras la renuncia de la ministra Milagros Germán. La organización hizo un llamado al Gobierno para que defina con urgencia el rumbo de esta institución, clave para el desarrollo cultural y socioeconómico del país.
Pedro Julio Quezada, director ejecutivo del OCCRD, destacó la importancia de prestar atención al sector cultural, ya que este es un pilar fundamental para el desarrollo nacional. “La cultura es el alma viva de los pueblos y un elemento clave para la integración y el crecimiento socioeconómico”, afirmó Quezada. Además, señaló que la cultura tiene un impacto transversal en áreas como el turismo, la educación, la gastronomía y la artesanía, sectores que pueden potenciarse con políticas públicas bien diseñadas.
El Observatorio subrayó el impacto económico de la cultura dominicana, respaldado por datos de la Cuenta Satélite de Cultura del Banco Central. Según este informe, el sector cultural contribuyó con el 1.6% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2010, con un consumo anual de bienes y servicios culturales valorado en RD$107,628 millones. Sin embargo, el proyecto de la Cuenta Satélite de Cultura, que busca medir y visibilizar el aporte económico del sector, se encuentra paralizado desde hace años, lo que ha impedido actualizar estos datos y planificar estrategias basadas en información reciente.
Quezada recordó que, en 2014, la Primera Encuesta Nacional de Consumo Cultural reveló el potencial del sector cultural para impulsar el desarrollo nacional. “Hay un mercado local e internacional preparado para consumir los productos que genera la industria cultural dominicana”, afirmó. No obstante, la falta de continuidad en las políticas públicas y la ausencia de liderazgo en el Ministerio de Cultura han frenado el avance de iniciativas clave.
El OCCRD instó al Gobierno a priorizar el sector cultural, asignando un presupuesto no menor al 2% del presupuesto nacional para este ministerio. “Es esencial reestructurar el aparato público del Estado en relación a este ministerio y dotarlo de los recursos necesarios para cumplir su misión”, expresó Quezada. Asimismo, hizo un llamado a trabajar de la mano con los sectores organizados de la sociedad, los empresarios y la ciudadanía en general, para impulsar el desarrollo nacional desde la gestión cultural.
“La cultura no puede seguir siendo relegada. Es hora de que el Gobierno demuestre voluntad política y asigne los recursos necesarios para que el Ministerio de Cultura pueda operar de manera eficiente y efectiva”, concluyó Quezada. El Observatorio Cultural Caribeño espera que las autoridades actúen con celeridad para nombrar un nuevo ministro o ministra y reactivar los proyectos culturales que están en pausa, garantizando así el desarrollo integral del país.