Tokio, (EFE).- El índice de aprobación del gabinete del primer ministro nipón, Shigeru Ishiba, cayó al 32,1 % desde el 50,7 % en el que se situaba antes de las elecciones generales que Japón celebró el domingo y en las que la formación que encabeza, el Partido Liberal Democrático (PLD), perdió la mayoría parlamentaria.
Así lo indica una encuesta llevada a cabo por la agencia de noticias japonesa Kyodo cuyos resultados fueron publicados hoy y reflejan la baja popularidad entre el pueblo japonés del gobierno de Ishiba, quien ya inició su mandato con baja aceptación pública para un político que se estrena en el cargo de primer ministro.
El 53 % de los encuestados por Kyodo dijo que no quería que siguiera al frente del país asiático la coalición gobernante hasta ahora entre el PLD y el partido budista Komeito, mientras que el 38,4 % opinó lo contrario.
Al PLD le faltó apoyo en las urnas para obtener los 233 escaños que fijan la mayoría parlamentaria simple en la Cámara Baja nipona y logró 194 asientos, una aguda caída respecto a los 256 que poseía antes de los comicios.
La representación de Komeito bajó también, de 32 a 24 escaños, mientras que el escenario para la oposición fue diferente.
El principal grupo opositor, el Partido Democrático Constitucional (PDC), ganó terreno e incrementó sus asientos parlamentarios desde 98 hasta 148, y el Partido Democrático Popular, una escisión del PLD situada en la centro-derecha, cuadruplicó su representación.
Tras unos comicios que amenazan con abrir una fase de inestabilidad política en Japón, tanto el PLD de Ishiba como el PDC de Yoshihiko Noda -último mandatario nipón de un partido distinto al gobernante- han iniciado los contactos con otras formaciones para formar gobierno, tarea para la que tienen un plazo de menos de un mes.