Chicago (EE.UU.) (EFE). La Torre Trump en Chicago ha sido el centro de una campaña de marketing inusual por parte del Partido Demócrata, proyectando mensajes tanto de apoyo a sus candidatos como de crítica a los republicanos. Este evento ocurre mientras la ciudad se prepara para la Convención Nacional Demócrata (CND), que comienza mañana y donde se oficializará la candidatura de Kamala Harris para las elecciones presidenciales de noviembre.
La Torre Trump, un rascacielos emblemático de 423 metros de altura propiedad del expresidente Donald Trump, ha sido decorada con proyecciones que incluyen eslóganes de apoyo a los demócratas, como «Harris-Walz, alegría y esperanza», y críticas a los republicanos, como «Trump-Vance, tipos raros». El Comité Nacional Demócrata (CND) ha confirmado esta campaña a través de un comunicado firmado por su subdirector de comunicaciones, Abhi Rahman. Rahman enfatizó que el objetivo es mostrar el contraste entre los candidatos demócratas, Kamala Harris y Tim Walz, y sus rivales republicanos Donald Trump y JD Vance. El comunicado acusa a Trump y Vance de buscar su propio beneficio y promover una agenda que, según los demócratas, dañaría a las familias trabajadoras y sus libertades.
La Convención Nacional Demócrata se llevará a cabo en dos lugares principales: el United Center y el McCormick Place. La ciudad está blindada con una fuerte presencia policial y cordones de seguridad para proteger el evento y manejar las posibles protestas. Se estima que unas 50.000 personas asistirán a la convención, incluyendo compromisarios, voluntarios y periodistas de todo el mundo.
La seguridad en Chicago es especialmente alta debido a las previsiones de protestas contra el papel de Estados Unidos en el conflicto en Gaza. La convención es la primera completamente presencial desde la pandemia de COVID-19 y tendrá lugar en un contexto de creciente tensión política y social. La culminación del evento será el discurso de aceptación de Kamala Harris el jueves, marcando su oficialización como la candidata presidencial del partido para las elecciones de noviembre.
Este acto simbólico de proyectar mensajes en la Torre Trump busca no solo captar la atención de los medios, sino también reforzar la narrativa demócrata en un momento clave para el partido. La acción resalta el contraste entre las políticas y los candidatos, subrayando las diferencias con los republicanos y su agenda para el futuro.
En resumen, la campaña en la Torre Trump y la Convención Nacional Demócrata en Chicago representan un esfuerzo significativo para movilizar a los votantes demócratas y consolidar el apoyo a Kamala Harris y a su plataforma, mientras se enfrentan a una oposición republicana que sigue siendo una fuerza poderosa en la política estadounidense.