Barcelona (EFE).- La Copa del América es una competición de clubes náuticos y tripulantes profesionales, ajena a las Federaciones Nacionales, y su influencia en la progresión de los deportistas es limitada. España, que participó en la Copa del América cuatro veces, logró su mejor resultado en 2007 en Valencia, alcanzando las semifinales de la Copa Louis Vuitton y terminando cuarta en la general. Desde entonces, la vela española ha sido superada por la evolución tecnológica en la competición, que ha visto la llegada de catamaranes (2013), catamaranes con ‘foils’ (2017), y monocascos con ‘foils’ (2021 y 2024).
Sin embargo, España ha mantenido presencia en el Circuito Mundial SailGP de catamaranes con ‘foils’ F50, aunque actualmente no cuenta con equipos en la Copa del América ni en las grandes regatas oceánicas como el Vendée Globe, TP52 Súper Series, o Volvo Ocean Race. Los regatistas españoles que surgieron de la Copa del América ahora militan en equipos extranjeros.
En la 37ª Copa del América, donde las tripulaciones deben cumplir una estricta regla de nacionalidad, 70 españoles trabajan en los seis equipos, pero sólo en roles técnicos como ingenieros, meteorólogos, y entrenadores, ya que la regla impide su participación como tripulantes. La falta de avance en ‘foiling’ en España contrasta con el progreso de otros países, aunque la inclusión de clases olímpicas como el IQFoil (tablas con ‘foils’), Kite Foil (cometas sobre tabla con ‘foils’), y el Nacra17 (catamarán mixto) marca un cambio.
La Joven Copa y la Copa Femenina, que se disputarán por primera vez en la historia de la Copa del América, representan grandes oportunidades para la vela española. En la Joven Copa, competirán 24 equipos de 12 naciones, y en la Copa Femenina también habrá 24 equipos. Los equipos españoles en ambas competiciones incluyen destacados regatistas como Támara Echegoyen, Nicole van der Velden, y Neus Ballester en la Copa Femenina, y jóvenes promesas como Albert Torres, Marcos Fernández, y Neus Ballester en la Joven Copa.
La Copa del América también impulsará la Base Mini Barcelona para formar navegantes solitarios y el programa «Vela per a tothom» (Vela para todos), una iniciativa de vela adaptada. Además, el Centro Municipal de Vela en el renovado Port Olímpic de Barcelona ampliará sus servicios a centros escolares.
La formación de profesionales en la industria náutica, incluyendo diseñadores, ingenieros y constructores, así como la adaptación de la Inteligencia Artificial (IA) y la sostenibilidad mediante la ‘Economía Azul’, son pasos futuros que la Copa del América aportará a la vela española. Este enfoque incluye la descarbonización y el desarrollo de embarcaciones eléctricas y propulsadas por hidrógeno.