Panamá aumenta el cierre de pasos en la selva de Darién para “proteger” a los migrantes

0
61

Ciudad de Panamá (EFE).- El Gobierno panameño ha anunciado el cierre de entre cuatro y cinco pasos no autorizados en el área del Darién, la selva que sirve como frontera natural entre Panamá y Colombia. Esta medida tiene como objetivo dirigir el flujo migratorio hacia un “paso humanitario“, con la intención de proteger mejor a los migrantes que atraviesan esta peligrosa región y reducir la cantidad de personas que lo hacen de manera irregular.

El ministro de Seguridad Pública, Frank Ábrego, ha explicado que el cierre de estos pasos ilegales busca concentrar las patrullas del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) en áreas específicas para mejorar la seguridad y combatir eficazmente a los traficantes de personas que operan en la zona. Además, se ha establecido un “paso humanitario” que va desde Cañas Blancas hasta Lajas Blancas, donde los migrantes reciben atención de organizaciones internacionales como Cruz Roja, UNICEF y ACNUR.

Ábrego enfatizó que la intención no es cerrar la frontera, sino regularizar el tránsito migratorio para garantizar la seguridad de los migrantes y detectar posibles delincuentes que puedan cruzar la frontera sin documentos de identidad adecuados. Según las autoridades panameñas, estas medidas han permitido identificar a varias personas vinculadas con actividades delictivas, incluyendo a 18 individuos con relación a actividades terroristas que no fueron detectados por las autoridades colombianas.

Además, Panamá ha notificado al Gobierno colombiano sobre la implementación de esta nueva ruta segura para migrantes, aunque ha aclarado que no existe un puesto de migración conjunto entre ambos países en la zona fronteriza. El ministro también reveló planes para coordinar con países vecinos la repatriación de migrantes irregulares en los próximos días, como parte de los acuerdos establecidos, incluyendo un acuerdo con Estados Unidos para apoyar el transporte aéreo de extranjeros.

Estas acciones han generado diversas reacciones, incluyendo críticas del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien cuestionó la efectividad de las medidas de cierre de pasos y expresó preocupación por las consecuencias humanitarias que podrían resultar de estas políticas restrictivas en la frontera.

El flujo migratorio a través del Darién ha sido significativo, con más de 195,000 personas cruzando este año, en su mayoría venezolanos, lo que representa un desafío humanitario y logístico para ambas naciones involucradas.

Deja un comentario