En un mundo donde la conciencia ambiental es cada vez más imperativa, el compromiso con la preservación del medio ambiente adquiere una relevancia indiscutible. En este contexto, el Parque Cementerio Puerta del Cielo es un ejemplo de la armoniosa relación entre el ser humano y la naturaleza.
Desde su fundación, el Parque Cementerio Puerta del Cielo ha abrazado la idea de fusionar el recuerdo de seres queridos con la protección del entorno natural. Esto se manifiesta en la plantación de árboles y la creación de un entorno que honra a los fallecidos y ofrece un refugio verde para los visitantes.
La labor realizada en este camposanto ha dado frutos tangibles en la conservación de la flora local, gracias a iniciativas como la conformación de un «arboretum» y la plantación de especies nativas, endémicas, naturalizadas y exóticas. Estas acciones no solo tienen un impacto estético, sino que también contribuyen al mejoramiento del medio ambiente. La siembra de árboles embellece el paisaje, ayuda a combatir el cambio climático, purifica el aire, conserva el agua y proporciona hábitats para la vida silvestre. Además, la preservación de especies nativas garantiza la continuidad de la identidad dominicana y fortalece la resistencia ante posibles contingencias.
La diversidad de especies que alberga el camposanto es impresionante, desde el majestuoso Samán hasta la delicada Orquídea. Cada árbol y planta enriquece el ecosistema local, constituyendo un testimonio de la biodiversidad del país y una herramienta educativa invaluable para las futuras generaciones.
La gestión medioambiental del Parque Cementerio Puerta del Cielo va más allá de la siembra y el mantenimiento de árboles; se trata de un compromiso integral con la sostenibilidad ambiental. Los colaboradores, titulados como «Protectores del Medio Ambiente», reciben formación periódica sobre prácticas de siembra, poda, abono y fumigación, asegurando el cuidado adecuado de cada especie y área.
El Sr. Leonardo Vargas, presidente del Parque Cementerio Puerta del Cielo, señala que el camposanto es mucho más que un lugar de descanso final; es un testimonio vivo del compromiso humano con el medio ambiente. A medida que enfrentamos los desafíos ambientales del siglo XXI, Puerta del Cielo nos recuerda que la preservación de la naturaleza y el respeto por la vida son valores fundamentales que trascienden la muerte misma. En este Día del Medio Ambiente, celebremos el legado verde y renovemos nuestro compromiso con un futuro más sostenible para todos.
En el Día Mundial del Medio Ambiente, plantamos en nuestro camposanto Rosas de Bayahíbe, la flor nacional dominicana. Este emblema de la biodiversidad y belleza de nuestra tierra representa vida, renovación y esperanza. Este gesto, enmarcado en una fecha tan especial, subraya la importancia de acciones para la protección del medio ambiente.
Cada rincón del camposanto está cuidadosamente diseñado para integrarse armoniosamente con su entorno, creando un ambiente acogedor y respetuoso con la naturaleza. Los visitantes pueden disfrutar de espacios sombreados, bancos y senderos que invitan a la contemplación y la reflexión.
En conclusión, el Parque Cementerio Puerta del Cielo es un modelo de cómo los espacios dedicados al recuerdo pueden simultáneamente servir como bastiones de la conservación ambiental. A través de su compromiso con la biodiversidad y la educación ambiental, este camposanto no solo honra a los fallecidos, sino que también ofrece un legado vivo de sostenibilidad para las generaciones futuras.