Barcelona, Los nuevos modelos de automóviles para los próximos tres y cinco años serán de una gama de colores más expresiva y menos clásica, con tonos como el “verde pastel reluciente” y el “rojo fluorescente”, según las tendencias generadas por la Inteligencia Artificial del nuevo catálogo de colores presentado por BASF.
La colección ‘ON VOLUDE’ de la multinacional alemana para 2023 y 2024 deja atrás los colores clásicos de la automoción y da paso a una generación cromática centrada en “tonos más claros y en la exploración de nuevos y expresivos espacios de color”, según se destaca este miércoles en un comunicado de la compañía.
La división de revestimiento de automóviles de Basf analiza tendencias futuras a través de fuentes como la industria, la moda o los productos de consumo con herramientas de inteligencia artificial para desarrollar texturas y posiciones de color que serán utilizadas por los fabricantes de automóviles durante su producción en masa.
El catálogo para Europa, Oriente Medio y África se centra en tonos beige claros, “colores no automovilísticos” con el fin de “introducir nuevos y emocionantes espacios de color”, según ha afirmado el jefe de Automotive Color Design de BASF, Mark Gutjahr.
Por su parte, la jefa de Automotive Color Design para Asia Pacífico, Chiharu Matsuhara, ha destacado una tendencia de colores “más osados” en esta región del mundo junto a los acabados relucientes para crear un aspecto “moderno y futurista” a partir de materiales sostenibles.
En el caso de América, los tonos contribuyen a un efecto refrigerante en los vehículos con reflexión solar y funcionan con conceptos de movilidad basados en sensores.
En esta región, “en la colección de este año, los tonos pastel e intermedios que tienden al rojo han sido sustituidos por efectos de color amarillo y verde, que sugieren renovación”, ha dicho la responsable de Automotive Color Design para América, Liz Hiffmann.
La paleta presentada por BASF tiene también en cuenta la sostenibilidad de los productos a la hora de generar las tonalidades, realizadas a través de un proceso sostenible y con materias primas recicladas u obtenidas de forma compatible con el medio ambiente.
Para desarrollar esta innovación, la empresa química inauguró en junio su nuevo centro de tecnología en Marchamalo (Guadalajara), con el que atiende a más de cien factorías automovilísticas en Europa, Medio Oriente, África y Asia, y que está dedicado a investigar y replicar el proceso de pintado con nuevos equipos de eficiencia energética y reducción de emisiones.
Este centro tecnológico está dedicado a investigar y replicar el proceso de pintado dentro de cualquier factoría de vehículos, teniendo cuenta los factores individuales de cada línea de producción, y cuenta con unas instalaciones digitalmente conectadas con los sistemas internos de gestión y control de procesos, compartiendo interconexión digital con otros centros de BASF a nivel mundial.